UNA DESPEDIDA MAS
La besó. Volvió a besarla. Siguió besándola. La encerró entre sus brazos. Acarició sus hombros. Ella volaba, soñaba, reía. Un instante de amor es eterno. La besó una vez más. No podían separarse. No deseaban dividirse.
Ella cruzó la puerta y escribió una nota. Él ensayaba el sueño. Ella volvió la cabeza. Él no despego su cabeza de la almohada. Ella se perdió entre la gente. Él se quedó sin la gente. Ella llegó a su casa. Él dispuso de su noche. A las cuatro semanas ella regresó al mismo lugar. Él nunca regresó por completo. Ella cree que encontró la infidelidad. Él cree que conoció la libertad.
"Solo en la agonía de despedirnos somos capaces de comprender la profundidad de nuestro amor"
Ella cruzó la puerta y escribió una nota. Él ensayaba el sueño. Ella volvió la cabeza. Él no despego su cabeza de la almohada. Ella se perdió entre la gente. Él se quedó sin la gente. Ella llegó a su casa. Él dispuso de su noche. A las cuatro semanas ella regresó al mismo lugar. Él nunca regresó por completo. Ella cree que encontró la infidelidad. Él cree que conoció la libertad.
"Solo en la agonía de despedirnos somos capaces de comprender la profundidad de nuestro amor"